Eh tu, si, tú, ese que se hace llamar Destino. Si lees esto que sepas que no podrás conmigo, soportaré esto y mucho más. Seguiré buscando. Da igual todas las piedras que me pongas en el camino, me da igual lo grandes que sean, el color, la forma y el porqué estén ahí, a modo de obstáculo. Ninguna de ellas logrará que deje de intentar ser feliz, que deje de luchar por todo eso que vale la pena. Y mientras haya una posibilidad, media posibilidad entre mil millones de alcanzar todo aquello que busco, no dudes que iré a por ello.
Considéralo un desafío.
Considéralo un desafío.
Uff¡¡no conocía tu blog y me ha encantado tu entrada que positiva.
ResponderEliminarUn bs
Una dosis alta de positividad va siempre bien, para todo lo que te propongas...
ResponderEliminarun besito!
Loca por lo tacones